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¿Por qué invertir en Depósito a Plazo?

Obtendrás una tasa exclusiva con la que siempre ganarás un interés sin un monto máximo de inversión. Realiza tus inversiones desde donde estés de forma rápida y sencilla, desde 7 hasta 365 días de plazo de inversión.

Escoge el tipo de depósito que más te acomode. El Depósito a Plazo Fijo tiene fecha de vencimiento establecida, mientras que el Depósito Renovable se renuevan automáticamente.

Requisitos para Depósito a Plazo

Para acceder al Depósito a Plazo Scotia es importante que tengas en cuenta estos requisitos y así aprovechar al máximo tu inversión:
  • Si eres cliente podrás invertir a partir de $5.000 a través de tu Sitio Privado ingresando con tu rut y clave.
  • En cuanto al abono por la liquidación del Depósito a Plazo, este se realizará a una Cuenta Corriente Scotia.

Beneficios del Depósito a Plazo Scotia

  • Depósito a Plazo con tasa de interés conocida.
  • Como titular de la inversión recibirás la ganancia de tu inversión al término del plazo convenido.
  • Seguridad del certificado de inversión a través del servicio de Custodia Electrónica.
  • Podrás renovar automáticamente tu Depósito a Plazo.
  • No tiene costos asociados.
  • Seguridad de la inversión, puesto que tiene garantía estatal a los depósitos que cubre hasta UF 200 en una misma institución financiera y hasta UF 400 en todo el sistema financiero por año calendario.

Tipos de Depósitos a Plazo

Existen distintas opciones de inversión cuando se trata de un Depósito a Plazo, aquí te asesoramos para que conozcas los tipos de depósitos que mejor se adaptan a tus metas de inversión:

Depósito a Plazo Fijo

Al invertir en un Depósito a Plazo Fijo tú pactas el capital a invertir, el plazo y la tasa de interés. Este tipo de depósito tiene fecha de vencimiento establecida, cuando termina el periodo acordado, recibirás el monto del capital invertido más los intereses ganados en el periodo establecido.

Depósito a Plazo con Renovación Automática

Para un Depósito a Plazo con Renovación Automática, tú pactas el capital, el plazo y la tasa de interés. Este se renueva automáticamente después del periodo acordado, reinvirtiendo los recursos (capital más intereses) de forma automática.